viernes, 10 de enero de 2014

PROBLEMAS EMOCIONALES COMO PODERLOS ABORDAR CENTRO Y ESCUELA DE NATUROPATÍA LESAM



Desde el Centro LESAM, entendemos los denominados trastornos psicológicos como dificultades vitales que tiene una persona, que no está sabiendo encontrar una forma constructiva para afrontarla que enriquezca su vida. 

NO entendemos los trastornos psicológicos como enfermedades que existen en el interior de la persona, sino que son el resultado de una interacción desadaptativa entre la persona y su ambiente. 

El interés del Centro LESAM, es ayudar a las personas a conseguir sobreponerse a los estados emocionales que les estén bloqueando. Intentando que la persona sienta que su existencia es valiosa, y tenga la energía suficiente para perseguir sus objetivos. Se busca que la persona identifique que reaccionando a los pensamientos o emociones de la manera que viene haciendo, está limitando y empobreciendo su vida; y el objetivo final es una vida rica en alicientes.




  • Trastorno de pánico: Se considera que sucederá cuando la persona al vivir una situación que le genere ansiedad intensa, la experimenta como problema o peligro; y por tanto, intentará deshacerse de ella (evitarla) y obtendrá un efecto paradójico, ya que en lugar de disminuir se hace más intensa y frecuentes.
  • Agorafobia y otras fobias: La persona intenta evitar la ansiedad que se presenta en situaciones concretas, y para no experimentar la ansiedad, evita directamente acudir a ciertos lugares con la correspondiente limitación vital.
  • Trastorno obsesivo-compulsivo: La persona para evitar la ansiedad asociada a un pensamiento o una sensación (obsesión), se siente obligada a provocar otro pensamiento (compulsión cognitiva), u otra conducta (compulsión conductual). A la larga, la persona limita su vida por un exceso de atención a las obsesiones, al verse esclavo de las compulsiones.
  • Trastorno de ansiedad generalizada: Se considera que la persona mediante la “preocupación” trata de evitar estados emocionales. La más frecuente es la incertidumbre (una de las emociones que más nos cuesta manejar a los humanos), por eso la persona vive gran parte del día en el futuro virtual en su cabeza, intentando anticipar lo que pueda pasar, porque si no lo tiene previsto existe la duda. También se evitan otras emociones como la culpa, en la que la persona intenta resolver el pasado virtual en su cabeza, para conseguir no sentirse culpable en el presente. También se estará en un momento de gran preocupación siempre que la persona esté experimentando malestar y esté intentado descubrir cómo deshacerse de él.
  • Trastorno de estrés postraumático: La persona que desgraciadamente ha vivido unas circunstancias que nunca hubiera querido vivir, intenta no revivirlas en su mente (recordarlas) y para ello crea toda una serie de estrategias: no pensar, no acudir a determinados lugares, no quedarse solo, etc. Algo que finalmente tiene como efecto paradójico un empobrecimiento vital, y un sentimiento de esclavitud continuo por la circunstancia que forma parte de nuestro pasado. 


El objetivo de NUESTRO TRATAMIENTO es potenciar que la persona pueda sentirse orgullosa del ser humano que es, de cómo está decidiendo vivir, de sus recuerdos futuros. Para ello, el reto es conseguir decidir momento a momento, vivir de tal manera que cuando nos metamos por la noche en la cama, nos sintamos cómodos con la forma en que hemos vivido, tanto los acontecimientos agradables como los desagradables.

Nuestra propia biografía, lo que ya hemos vivido, determina las circunstancias que serán relevantes para cada uno de nosotros. Una persona a la que jamás le hayan roto el corazón (o haya tenido algún tipo de experiencia parecida) seguramente, al iniciar una relación, no experimentará las mismas emociones que una persona que ha pasado por esa experiencia. Quizá por eso dicen que como el primer amor no hay ninguno.


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